Hace unas semanas, no se exactamente cuando, una compañera de colegio de Sara celebró su cumpleaños.
Poco a poco te vas enterando de cosas que pasaron en ese cumpleaños y no puedo más que quedarme atónito.
Igual es que me he quedado anticuado??
Pues bien, en ese cumpleaños bebieron sangría y fumaron de una cachimba ( o incluso de dos)
Al principio pensé que fue cosa de los críos, pero a medida que te vas informando, descubres que la sangría la llevó la madre de una de las niñas y las cachimbas la madre de otra.
Quiero recordar que estamos hablando de niños (o adolescentes) de trece y catorce años!!!!!
Siendo realistas, la adolescencia de nuestros hijos no tiene nada que ver con la nuestra. Ellos tienen muchas más "facilidades" y mucha más información que nosotros, y por tanto "avanzan" en la vida más deprisa que nosotros. pero no debemos ser nosotros los padres los que les incitemos a ellos.
Creo que nos estamos pasando con la vida moderna y las libertades.
Que cada cual haga lo que quiera con la educación de sus hijos, pero no me parece bien que inciten al consumo de alcohol y opiáceos a los hijos de los demás.
Por suerte Sara no fue a ese cumpleaños, por que si no estaría en el dilema de ir a la policía a poner una denuncia.
Lo que me deja descolocado y haciendo pensar si el raro soy yo, es que varias madres lo sabían y les pareció "normal".
Sólo quiero recordar a los adolescentes que puedan leer esto, es que cuando más rápido vives la vida, más deprisa envejeces. Cada cosa tiene su tiempo y su lugar, y que el hacer las cosas a destiempo normalmente solo trae desgracias para el futuro.
No tengáis prisa por crecer, que por desgracias el tiempo pasado ya no volverá y tenéis toda una vida por delante para descubrirla.
"Más sabe el diablo por viejo que por diablo"